lunes, 24 de agosto de 2009

El pesa-nervios de Antonin Artaud

Si uno pudiera probar solamente su nada, si uno pudiera reposar en su nada y que esa nada no fuera una cierta forma de ser, pero tampoco la muerte total.
Es tan duro dejar de existir, dejar de estar dentro de algo. El verdadero dolor es sentir cómo se desplaza nuestro pensamiento en uno mismo. Pero el pensamiento como un punto no es seguramente un sufrimiento.
Estoy en el instante en que no me aferro más a la vida, pero llevo conmigo todos los apetitos y las insistentes titilaciones del ser. No tengo más que una ocupación: volverme a hacer.

1 comentario:

  1. Qué bueno que nos traigas aquí las reflexiones atormentadas del gran Artaud.
    Esa manera de sentir el dolor y dejar semejante constancia de ello, lo hacen único, una figura querida y terrible como pocas.
    Un beso. Me encanta tu blog.

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